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Jalapa
del Marquez (Ana Ma. Sánchez).- A pesar del maravilloso espectáculo visual y
arquitectónico que emerge en época de secas, cuando bajan los niveles de la
presa “Benito Juárez”; esta situación es de preocuparse, ya que, en la
actualidad, la presa sólo muestra un 16 por ciento del almacenamiento total.
De
acuerdo a campesinos y pescadores, los niveles de la presa son tan bajos que
anticipan épocas desastrosas para abril y mayo, que es la temporada de mayor
estiaje, aunado a ello, los anuncios de las altas temperaturas a registrarse en
la región del Istmo.
Las
lluvias registradas en este año y finales del año pasado no han logrado resarcir
el abasto del vital líquido.
CONAGUA
hace referencia a que en el 2015; 16 municipios del Istmo de Tehuantepec
padecieron los estragos de una sequía extrema. Las lluvias registradas en los
últimos dos años han sido muy por debajo de lo habitual, la falta de
precipitaciones pluviales han generado que la presa “Benito Juárez” en Jalapa
del Márquez, con una capacidad de 942 millones de metros cúbicos de almacenamiento,
se reduzca a menos del 15 por ciento de su capacidad, emergiendo las ruinas de
la ciudad y templo dominico que se encuentran en el fondo de la presa.
Actualmente,
la presa que surte del vital líquido a 25 municipios del Istmo de Tehuantepec,
no se encuentra seca. Sin embargo, a pesar de las lluvias, sólo ha logrado
almacenar el 30 por ciento de su capacidad.
De
continuar esta escasez de agua, en febrero próximo la presa podría cerrar,
advirtió Arnulfo Ramírez Rojas, jefe del distrito de riego 19 del Istmo de
Tehuantepec. Comentó que unas 16 mil hectáreas agrícolas y ganaderas se verían
afectadas, aunado a más de 800 pescadores cuyo principal sustento es la venta
de mojarras. El almacenamiento actual, detalló, es de apenas 225 millones de
metros cúbicos y continúa en descenso porque se siguen regando los campos.
Adelantó que 2017 será un año muy difícil durante el ciclo primavera-verano,
pues el campo y otros usuarios viven de esa agua.
La
falta de agua se resiente en todos los municipios del Istmo de Tehuantepec,
desde Matías Romero hasta Ixtepec, en Tehuantepec y Salina Cruz; aún
localidades pequeñas, como Lagunas, municipio de El Barrio de la Soledad, se
quedaron sin agua el año pasado y, de acuerdo a los pronósticos este 2017 será
mucho peor.