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Sarabia, San
Juan Guichicovi (Colaboración).- Los El 17 de marzo de 2015, el río
Sarabia, ubicado en la zona norte del Istmo de Tehuantepec, fue afectado por un derrame de combustible que dañó
cultivos de varias comunidades de San Juan Guichicovi y de Matías Romero.
Desde
ese día, Boca del Monte y Sarabia, Paso Real y Benito Juárez, entre otras
comunidades mixes, han tenido
reuniones con el personal de
PEMEX tanto en la comunidad como en la
ciudad de Salina Cruz en las que se han abordado las demandas de los campesinos,
acompañados de sus autoridades, para que la paraestatal se haga cargo de los
daños y atienda las afectaciones en los terrenos de cultivo y pastoreo.
En
esas reuniones, PEMEX ha enviado a funcionarios que atienden la parte social. Sin embargo a más de un mes de ocurrido el
accidente, la limpieza del río se está realizando de manera lenta y superficial por parte de la empresa.
Por
otra parte, no se han cubierto a los ejidatarios, los pagos por las
afectaciones ocasionadas ni ha habido avances en sus peticiones entre las que
se encuentran, en el caso de Boca del Monte,
el abastecimiento de agua limpia para los animales, la construcción de
un pozo profundo y de un puente colgante para cruzar el río hacia los terrenos
de cultivo.
La
comunidad de Boca del Monte, representada por sus autoridades, valora que los
daños a la tierra y al río en la zona afectada son de grandes dimensiones y que en la temporada de lluvias
el daño será mayor pues los escurrimientos alcanzarán más terrenos.
Las
milpas ya se están secando y los
campesinos que tienen ganado a la orilla del río han tenido que acarrear agua
para llevarles a sus animales que padecen las altas temperaturas de la
temporada de calor pues ya no pueden beber agua del río.
Las
mujeres que en estos meses de escasez de agua acudían al río para lavar ropa
también están afectadas, y el pueblo en general que no pudo disfrutar de su río
en la Semana Santa.
Los
afectados directamente, las autoridades y el pueblo en general, están muy
molestos por la negligencia de PEMEX.
Toda la cadena alimenticia fue afectada, hubo mortandad de peces, las
ramas bajas de los árboles fueron cubiertas por el combustible.
Entre
la desesperación, los afectados se preguntan “por qué actúa PEMEX así, cuando a
los pobres nos agarran con un carrito de leña, o si cortamos un árbol sin
permiso, vienen sobre nosotros y esto que es daño grande bajo la responsabilidad de una empresa como PEMEX, no se le da
solución”.
“Desde hace
alrededor de 50 años, estamos rodeados de tubos del lado de la carretera
y del lado de los terrenos de cultivo y pastoreo”, dice otro ejidatario.
Actualmente
PEMEX planea la construcción de otros dos ductos que pasarán cerca de estas
poblaciones, uno de gas y otro de una sustancia de la cual la empresa no quiere
dar información completa a las comunidades.
Los
afectados manifiestan que de no cumplir PEMEX con sus obligaciones y
compromisos, acudirán a otras instancias y tomarán otras medidas pues está visto
que cuando muestran disposición la empresa se burla de los pueblos.