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Álvaro Obregón (Mariano
López).- Desde las primeras horas del primer día del mes de febrero, la policía
estatal intentó intimidar a los opositores al proyecto de la empresa Mareña
renovables, esto en Álvaro Obregón,
decenas de camionetas de la policía comenzaban a sembrar terror a los
pobladores, al mismo tiempo los indígenas buscaban reorganizarse.
Después de tres días en que la policía ingresará en la población realizando sus
rondines al parecer para intimidar a los
indígenas que se mantiene en resistencia.
Luego en que la mañana del primer día de febrero los
extranjeros directivos de la empresa Mareña Renovables donde se encintraba el director
general Jonathan Davis. fueron fuertemente custodiados por la policía estatal
entre ellos se encontraba Pedro Santiago asesor del Diputado Federal Samuel
Gurrión Matías, los uniformados por la noche atacaron brutalmente a los
opositores al proyecto eólico de Álvaro Obregón, quienes se encontraban en la
ex hacienda del General Heliodoro Charis Castro, la fuerza pública al parecer estratégicamente
dejaron las más de 35 camionetas en la entrada de la población, estos trataron
de sorprender a los indígenas zapotecas quienes se encontraban realizando guardias,
esto para evitar que el consorcio español mareña renovables ingresará con sus
maquinarias, días antes la transnacional había intentando ingresar con la
fuerza policíaca en la laguna punta de agua e iniciar sus trabajos, el
consorcio extranjero desacatando el amparo de suspensión de la obra de Mareña Renovables
otorgado por un juez federal, violentó con aproximadamente cuatrocientos
elementos policíacos a la comunidad indígena de Álvaro Obregón la noche del
primero de febrero.
Mareña Renovables utilizando la fuerza
policíaca al parecer como primer paso
para apoderarse del espacio de la resistencia,
intentaron desalojar y controlar uno de los caminos que conduce hacia la
entrada de la laguna punta de agua.
Los uniformados ingresaron
a pié para evitar ruido, todos violentos con
armas largas, toletes y escudo intentaron retirar de la ex hacienda del General Charis a los
opositores, en ese momento inició el zafarrancho, los uniformados huyeron de la
comunidad, debido a que la gran mayoría de la población salieron de sus casas
para enfrentar a la policía estatal, algunos policías que no pudieron escapar
ofrecían disculpas a la comunidad para que no fueran agredidos, mientras los
pobladores les gritaban “ya no
regresen”, “lárguense” la comunidad les permitió que se retiraran sin ser
agredidos, el saldo de esa noche en el enfrentamiento arrojó nueve lesionados, tres
de Álvaro Obregón y seis policías.