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Oaxaca (Antulio López).- Para muchos jóvenes, la estatua frente a la catedral de Oaxaca, no representa nada y su nombre ha sido olvidado; se trata de Antonio de León, General y héroe oaxaqueño, a quien el pasado 4 de junio, autoridades capitalinas reconocieron su amor a Oaxaca y su lucha contra las fuerzas imperiales, en el marco de lo que sería el CCXVII aniversario de su natalicio.La guardia de honor estuvo encabezada por el síndico primero Felipe Heredia Marín, y regidores y regidoras de Servicios Municipales, Flor Hernández Quero; de Ecología y Medio Ambiente, Elsa de la Soledad Martínez Iturribarría; de Salud Pública, Rubén Tenorio Vasconcelos; de Participación Ciudadana y Organización Comunitaria, Ángel Evaristo Moreno Estévez y de Planeación y Ordenamiento Urbano, Enrique Cortés Guzmán.
Originario de la región de la Mixteca, Antonio de la Luz Quirino de León y Loyola nació el cuatro de junio de 1794 en el municipio de Huajuapan, Oaxaca. Luego de incursionar al servicio de las armas desde muy pequeño, Antonio de León tuvo una carrera militar muy destacada. En julio de 1820, a sus 26 años, fue elegido como el primer Presidente Municipal del Ayuntamiento de Huajuapan.
Fue seis veces gobernador del estado de Oaxaca; su primer mandato se presentó bajo la regencia del Imperio siendo Comandante en jefe de las Fuerzas Imperiales. Su amor a la patria lo hicieron merecedor de los títulos de Consumador de la Independencia de Oaxaca y Benemérito del estado de Oaxaca, así como Benemérito de la Patria.
Su efigie de bronce fue colocada el 8 de septiembre de 1885 en la Alameda del Centro Histórico de nuestra ciudad y sufrió algunos desperfectos el pasado 17 de mayo, luego de que cayera sobre ella un laurel.
Sin embargo, en la actualidad, la estatua fue restaurada por Miguel Adrián Pérez Aranda, a través del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) que avaló el proyecto de restauración.
