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Matías Romero (Augusto Ruiz).- El asunto del
agua potable y la problemática en el Centro de Salud, ambos en Matías Romero,
han demostrado que el Gobierno del Estado es ineficaz e inoperante; pero, sobre
todo, ha relucido el poco control que tiene el mandatario estatal, Gabino Cue
en las diferentes áreas de Gobierno.
Dos
problemas que no son de hoy, pero que el pueblo de Matías Romero ha tolerado y
permitido lleguen a los extremos. El asunto de la falta de agua potable que
condujo al cierre de la Administración del Sistema Operador, para exigirle al
Gobierno aplique los recursos y resuelva un problema de más de 50 años.
Un
problema en donde se tiran millones de pesos tan sólo para paliativos, mientras
las familias siguen pagando por recibir en sus hogares aguas de excremento;
pues en el río Malatengo, principal fuente abastecedora del vital líquido,
descargan las aguas de drenaje de los municipios vecinos.
Sin
embargo, las autoridades han dejado que el tiempo pase, tal vez, imaginando que
el movimiento se desgaste y las cabezas visibles, que dirigen la protesta se
desvirtúen.
En
el caso del Centro de Salud, Matías Romero debería estarle agradecido al ex
líder sindical, Jenoé Ruiz López, quien por cierto, pretende retomar el cargo
que, por un tiempo, le dejó encargado al enfermero, Mario Felix Pacheco. Pues,
su intención de imponer representante sindical abrió la cloaca para que se
hablara de los aviadores, de los desvíos de recursos y de la empresa tan
rentable que maneja la Sección 35, más allá de los que podría mandar, ordenar y
disponer el Secretario de Salud o el propio Gobernador del Estado.