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Matías Romero (Pedro Alberto Sibaja
Guzmán).- Nuevamente
pasajeros volvieron a vivir momentos de angustia y desesperación cuando el
camión en el cual viajaban fue atacado a pedradas y palos por sujetos que, al
parecer se encontraban por el campo de futbol en el tramo carretero de La
ventosa, Agencia Municipal de Juchitán.
Esto
ocurrió la noche del jueves, 6 de octubre, se cree que los atacantes quieren
imitar el modus de operar de asaltantes en carreteras y autopistas de Chiapas y
Morelos; arrojan proyectiles para provocar que el conductor baje la velocidad y
frene para ver que es lo que sucede, mientras los ladrones toman por asalto el autobús,
en algunos casos, no sólo roban las pertenencias de los pasajeros sino que
además violan a las mujeres.
Ya
hace dos semanas, pasajeros de la línea de autobuses ADO GL, que viajaban del
Istmo de Tehuantepec rumbo a la ciudad de México, por la noche, justo cuando,
cruzaban el tramo carretero, entre la población de La Mata y Mazahua, saliendo
de Juchitán con dirección a Matías Romero.
De
acuerdo a pasajeros de ese autobús, fueron atacados por sujetos no
identificados que arrojaron piedras y objetos de metal, intentando que el
conductor frenara.
En
un video publicado en el Facebook, se observa como el conductor del autobús
comienza a bajar la velocidad, pero ante la insistencia de los pasajeros para
que no se frenara este continuó su marcha.
Algunos
pasajeros criticaron la actuación del conductor, puesto que intentaba frenarse
cuando claramente se percibió que los sujetos intentaban asaltar el autobús.
No
es la primera ocasión que este tramo es utilizado por los delincuentes para
asaltar tanto autobuses de pasajeros como carros particulares. Anteriormente
los delincuentes colocaban piedras y palos sobre la carretera obligando al
conductor a frenar.
En
esta ocasión la carpeta asfáltica estaba libre al paso; los delincuentes
intentaron detener el autobús rompiéndole las ventanas, pero la presión de los pasajeros
evitó que el chofer frenara permitiendo a los delincuentes ingresar al camión y
lograron así huir y mantenerse a salvo.
Es cuestionable lo solas que se encuentran las
carreteras del Istmo, sin el patrullaje de la Policía Federal. Aunado al
peligro al que se exponen cientos de familias que a diario recorren estos tramos
carreteros, ya que, debido al mal estado de las carreteras y las obras que
nunca se terminan de realizar en la misma, los conductores deben bajar la
velocidad, pudiendo ser presas fáciles de los asaltantes.
