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México
(LA CRÓNICA).- Bien que conoce usted a Ulises Ruiz, aquel gobernador entregado
a Roberto Madrazo Pintado que sacrificó a sus gobernados, los oaxaqueños, para
apoyar en 2006 la candidatura presidencial del tabasqueño con el presupuesto
estatal.
Seguramente
también conoce otros arranques de ese priista, como el que enseguida le
transfiero en lo esencial de la columna Detrás de la Noticia que el 29 de
diciembre pasado publicó, en Oaxaca capital, mi amigo y colega Alfredo Martínez
de Aguilar sobre un hecho inusitado en otros, mas no en Ulises, que hoy está
recobrando vigencia y por ello lo comparto con mis estimados lectores y con
usted:
“…
Sin filias ni fobias, desde ya podemos adelantar que el senador con licencia
Eviel Pérez Magaña no será el abanderado del PRI-gobierno por los agravios de
su jefe y mecenas político al hoy presidente.
“La
historia ha sido comentada por el propio actor central. Corría la recta final
del aciago prefabricado conflicto político-social de 2006, cuando Ulises Ruiz
Ortiz mentó la madre a Enrique Peña Nieto con todas sus letras.
“Ambos
eran entonces gobernadores de Oaxaca y del Estado de México, respectivamente, y
Peña Nieto sugirió a Ulises que solicitara licencia por tres meses, mientras se
calmaban las aguas y tomaba la Policía Federal la capital oaxaqueña.
“El
hoy presidente de la República no actuó de motu proprio, pues recibió la
encomienda de los gobernadores priistas acompañado de Natividad González Parás,
en ese entonces gobernador de Nuevo León.
“Ante
tal sugerencia, Ulises montó en santa cólera y palabras más palabras menos dijo
a su colega gobernador del Estado de México: ¡¿Y por qué mejor no vas y chingas
a tu madre?!
“…
Dolido por el atrevimiento de pedirle que dejara temporalmente el gobierno de
Oaxaca, Ulises, ya con tragos, se mofó y deshizo a manotazos el copete de
Enrique Peña Nieto, acompañado de palabras altisonantes.
“Si
para un simple mortal estos agravios son difíciles de olvidar y perdonar,
imagínese, querido lector, para el hoy todopoderoso Presidente de la República
cuya personalidad es proclive a no perdonar agravios.
“En
tales condiciones, todo parece indicar que Eviel Pérez Magaña no será candidato
del PRI a la gobernación del Estado de Oaxaca al pasarle el presidente la
factura por los agravios de Ulises…
“Ello
ocurrirá con todo y que mete ruido y genera confusión política que la
declinación de Toño Hernández Fraguas a favor de Eviel Pérez Magaña pareciera
tener línea del Comité Ejecutivo Nacional del PRI.
“Pues
resulta que antes que Hernández Fraguas se declarara partidario del senador con
licencia, durante la comida navideña ofrecida a los medios sostuvo una reunión
por tres horas con el nuevo delegado del CEN del PRI, Jesús María Rodríguez
Hernández.
“Por
cierto, según logramos establecer, el recién nombrado delegado especial del CEN
del PRI, originario de Querétaro, está íntimamente ligado a Oaxaca, pues está
casado con la salinacrucense Rosalinda López Hernández.
“Este
detalle hace suponer que con todo lo difícil que es el dirigente estatal del
Partido Revolucionario Institucional, Héctor Anuar Mafud, oriundo también de la
ciudad y puerto de Salina Cruz, se entenderá muy bien con él. ¿Será simple
coincidencia?”.
Hasta
aquí, licenciado Beltrones, la parte de la herencia que Ulises Ruiz dejó a
Eviel Pérez en su testamento político.
Quizás
tenga usted una idea diferente sobre la anécdota aquí reproducida y sus
posibles consecuencias electorales; algo que no tardaremos mucho en conocer.
lmendivil@delfos.com.mx,
m760531@hotmail.com
