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Matías Romero (Miguel Fernando).- El problema más
común en estas fiestas patrias son los vinculados con explosivos y pólvora, sin
embargo, en los municipios de la zona norte del Istmo, en caso de registrarse
algún problema con la quema de castillos, cohetones y bombas; tendríamos que
aprender a resignarnos y, como dijo el representante de PEMEX con el caso del
derrame de amoniaco en Chivaniza, “nos convertiríamos en fertilizante natural”.
De
acuerdo a las corporaciones de Seguridad Pública, más de 35 tipos de materiales
peligrosos son transportados diariamente por la carretera transístmica,
poniendo en peligro la vida de cientos de personas que habitan en comunidades
de la zona norte del Istmo; además de los fenómenos naturales: inundaciones,
sismos, incendios forestales y accidentes, como el ocurrido en Chivaniza.
No
obstante, estamos desamparados, ante la apatía de las autoridades, tanto
locales como estatales, quienes piensan que Protección Civil es sólo un puesto
de membrete o para aviadores.
De
ello deriva la necesidad de contar con una estación de bomberos que pueda actuar
de manera oportuna, eficiente y eficaz, en caso de siniestro en alguna de las
poblaciones que conforman la llamada zona húmeda del Istmo; integrada por los
municipios de Matías Romero, El Barrio de la Soledad, San Juan Guichicovi, los
dos Petapas y los dos Chimalapas.
La
directiva del patronado Para Apoyo a Bomberos de Matías Romero, encabezada por
Matías Vásquez León, Álvaro Ortiz Sierra, María del Rosario Vázquez Montero,
José Manuel Fernández Méndez, Fernando Cabrera Ordaz, Delfino Álvarez Peña,
Daniel Hernández Castro, Julio César Díaz Avendaño y Tore Knape Macías;
enviaron una solicitud de apoyo al Gobernador del Estado, Gabino Cue, haciendo
énfasis en la necesidad de contar con una estación de bomberos, pero a más de
dos semana, más de lo que la ley marca para dar respuesta a una petición por
escrito; no ha habido una respuesta.
Los
promotores destacaron que esta zona vive en riesgo latente; sin una corporación
que actúe de inmediato y evitar que un accidente cobre grandes magnitudes.
Y
es que en la carretera transístmica se han registrado accidentes de carro-pipas
cargadas de material peligroso y, lo único que se ha podido hacer es llegar con
la rudimentaria cubeta para combatir el fuego.
Son
condiciones infrahumanas, dijeron, por la carencia de servicios de emergencias
que puedan atender a la ciudadanía.
“No
tenemos personal capacitado, ni equipo para atender un siniestro de gran
magnitud; sin embargo, tenemos los ductos de PEMEX que constituyen un riesgo
letal y decenas de unidades cargadas con material peligroso cruzando por
nuestras ciudades.
No
sólo eso, hace unos días en Matías Romero una vivienda se calcinó en minutos,
debido a que sólo la cooperación y solidaridad de los vecinos participó para
combatir el incendio.
Por ello, exigieron al Gobernador de Oaxaca, Gabino
Cue, una respuesta a la solicitud y el apoyo para la conformación de este grupo
de emergencia.
