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Lagunas, El Barrio de la Soledad (Rosa
Ma. Villalobos).-
La situación que ha generado la actitud y forma de tratar al pueblo por parte
del sacerdote encargado de la Iglesia “Nuestra Señora de Guadalupe” en Lagunas,
ha propiciado inconformidad, rechazo hacia la Iglesia y la molestia de una gran
parte de la comunidad católica.
De
acuerdo a integrantes de la propia Iglesia, el clérigo no promulga con el
ejemplo y busca ser tratado como si fuera emperador, no ha querido irse a vivir
a la casa del sacerdote porque lo considera poca cosa, por lo que ha preferido
mantenerse en La Casa de Huéspedes de la Cruz Azul.
Su
trato déspota e intolerante ha provocado que gente de Lagunas prefiera realizar
sus ceremonias eclesiásticas de bodas, quinceaños y bautizos en otras
parroquias y asista a misa dominical en Matías Romero o en Petapa.
El
año pasado, la comunidad devota de San Judas Tadeo manifestó su desacuerdo,
pues, explicaron, el sacerdote se negó a recibir al santo, aludiendo que San
Judas Tadeo no es un Santo.
Por
otra parte, fotógrafos, festejados y comités de festejos también han
patentizado su rechazo hacia ese modo prepotente de tratar a la gente humilde,
siendo catalogado como un sacerdote que no promulga con el ejemplo los
preceptos y doctrinas de Jesús y sus apóstoles; queriendo recibir un trato de
monarca y ofrecer a los demás un trato déspota y marginal.
A
pesar de que este sacerdote ya había estado encargado de la Parroquia de
Lagunas, nunca antes había actuado de este modo; quizás su estancia en el
extranjero le hace pensar que las familias de Lagunas pueden ser tratadas como
miserables.
